La inteligencia artificial (IA) está revolucionando nuestras vidas, rutinas y trabajos a pasos agigantados. Tanto es así, que raro es el día en el que no veamos en los informativos o los periódicos noticias sobre esta tecnología innovadora y sus aplicaciones que, en muchos casos se alejan de prácticas del todo “lícitas”.
Y es que, si hace unos días veíamos cómo la Universidad de Nueva York prohibía el uso del sistema más popular ChatGPT para evitar que los alumnos copien, ahora son las universidades australianas las que cogen el relevo y, tras detectar el uso de estas plataformas por parte de los alumnos para copiar en exámenes o redactar trabajos, han decidido volver al método tradicional del papel y boli.
Pero no tenemos que irnos tan lejos para encontrar casos curiosos sobre el uso de ChatGPT. Pues dentro de nuestras fronteras, el periódico El País ha sometido a esta IA a examen y ha aprobado —raspado, eso sí— el examen de Historia de España que Aragón presentó en la Evaluación de Acceso a la Universidad (EVAU) de junio de 2022.
Como vemos, la IA ha llegado para quedarse, pero ¿sabemos realmente en qué consiste este sistema y cuál es el alcance de sus posibilidades?
Qué es la IA
La inteligencia artificial es un término amplio utilizado para describir sistemas informáticos en constante evolución que combinan algoritmos diseñados para reproducir funciones cognitivas humanas, como el aprendizaje, la resolución de problemas, la toma de decisiones y el procesamiento del lenguaje.
Pero, para conocer sus inicios, tenemos que remontarnos a los años posteriores a la Segunda Guerra Mundial, cuando se acuñó el término y se comenzó a ver su viabilidad gracias a los avances que el matemático británico Alan Turing había realizado en la materia con su máquina universal para descifrar los códigos nazis —si os interesa el tema, no os perdáis el largometraje Descifrando Enigma del director Morten Tyldum.
Los gigantes tecnológicos y las principales universidades llevan décadas explorando la IA; sin embargo, no es hasta los últimos tres meses, con la creación del chatbot ChatGPT por parte de OpenAI —fundada, como no podía ser de otra forma, por el empresario Elon Musk y Sam Altman—, cuando está cobrando protagonismo realmente.
Qué alcance tiene la IA en el entorno profesional
Esta tecnología tiene un gran potencial para transformar la forma en que operan las compañías de todos los sectores y se utiliza en una variedad de campos, como la automatización de procesos, el análisis de datos y la toma de decisiones, y el reconocimiento de voz y de imagen, entre otros.
También se utiliza para mejorar la eficiencia y la precisión en una variedad de tareas, desde el diagnóstico de enfermedades hasta la optimización de la logística, pasando por el análisis de grandes cantidades de datos y la generación de insights valiosos para las empresas.
El impacto de la IA en el futuro de la formación y el desarrollo
Aunque la IA sigue ofreciendo ventajas significativas para los programas de formación y desarrollo, también es importante que las organizaciones consideren cómo podría evolucionar esta tecnología en el futuro.
Mi previsión ante estos sistemas es que, en un corto espacio de tiempo, todas las organizaciones incorporarán herramientas de IA —en mayor o menos medida— en sus procesos operativos o productivos.
De hecho, en Kleinson ya lo hemos hecho —sin ir más lejos, parte de este artículo se ha redactado con un software— y, podemos presumir de ser la primera empresa de formación en idiomas a nivel internacional en utilizar la generación por IA de vídeos con avatares digitales.
Hemos creado más de 300 vídeos en 6 idiomas diferentes para ofrecer píldoras formativas sobre las habilidades profesionales indispensables para el entorno empresarial: presentaciones, reuniones, negociaciones, comunicación escrita, comunicación oral y lenguaje para socializar. Todos ellos enfocados a cubrir las necesidades lingüísticas del público en general.
En cuanto a sus posibles repercusiones, tal y como veíamos con los ejemplos del inicio, el crecimiento disparado de la IA también ha generado preocupaciones con respecto a los riesgos y desafíos éticos y legales que esta plantea. No obstante, desde mi punto de vista, a día de hoy y en un futuro próximo, se tratan únicamente de “validadores de procesos” que utilizan el conocimiento y la información en bruto disponible en todas las fuentes posibles de Internet, para ofrecerte una opinión de procesos ya implementados o que vas a implementar.
En fases posteriores, seguro que contarán con la posibilidad de afinar hasta elegir únicamente opiniones procedentes de fuentes con una reputación y una autoridad más precisas de expertos en la materia; es decir, similar a un gurú al que recurramos cada vez que queramos hacer algún cambio o alguna mejora.
Iñaki Nieto
CEO de Kleinson