Desde hace ya unos años, se viene demostrando la importancia que tiene el desarrollo personal en las empresas por su directa vinculación con el rendimiento y la productividad. Es por ello que, términos como «habilidades de liderazgo», «gestión del tiempo», «coaching» o «empatía», entre otros, son cada vez más habituales en el entorno laboral. Sin embargo, uno de los que quizá más se escuche es la Programación Neurolingüística, también conocida como PNL.
Qué es la Programación Neurolingüística
La PNL es una filosofía, un conjunto de métodos, herramientas y técnicas destinados a ser aplicados tanto en el ámbito personal como en el profesional de las personas, con el objetivo de identificar, comprender y usar patrones de pensamiento que influyen en el comportamiento de las personas para alcanzar metas y mejorar la calidad de vida.
Se trata de un concepto surgido a mediados de la década de los años setenta del siglo XX de la mano de los estadounidenses John Grinder y Richard Bandler. Estos, tras una serie de observaciones y estudios en la rama de la psicoterapia, determinaron que cualquier habilidad especial del ser humano tiene como base una estructura y unos patrones concretos que le permite ser identificada, comunicada, comprendida y utilizada por cualquier persona que lo desee.
Por qué se llama Programación Neurolingüística
Como su propio nombre indica, puede desglosarse en tres términos:
- Programación (P): hace referencia a los programas mentales que rigen nuestro pensamiento y comportamiento, y que nos ayudan a organizar nuestra experiencia para crear estrategias operativas que nos permitan conseguir nuestros objetivos.
- Neuro (N): se refiere al sistema nervioso. A través de los sentidos, recogemos información de nuestro entorno de manera consciente e inconsciente, que organizamos para crear una representación de la realidad. Es el responsable de nuestra experiencia de vivir y actuar en el mundo, pues toda acción o conducta resulta de una actividad neurológica.
- Lingüística (L): el lenguaje tanto verbal como no verbal nos permite comunicarnos y sirve para exteriorizar la actividad neurológica y la organización de las estrategias operativas. Da sentido a nuestras experiencias y ordena nuestros pensamientos y conductas.
Para qué sirve la PNL
Este conjunto de técnicas tiene como finalidad influir en la creación de hábitos mediante la interacción entre la mente y el lenguaje.
Y es que, gracias a esto, ha demostrado ser sumamente útil a la hora de potenciar las habilidades de comunicación y autoevaluación, mejorar el estado emocional de la plantilla, fomentar la empatía en el entorno de la empresa, mediar en la resolución de problemas, u optimizar los procesos de selección de personal, entre otros.
Desde un enfoque principalmente práctico, la PNL apuesta por la comunicación efectiva tanto con nosotros mismos como con el resto para mejorar la obtención de resultados o facilitar la consecución de objetivos de cada persona.
Por tanto, la PNL tiene distintos usos como, por ejemplo:
- Identificar y eliminar los bloqueos mentales que se interponen para alcanzar el éxito.
- Mejorar la comunicación con uno mismo y con el entorno que nos rodea.
- Ampliar el autoconocimiento sobre los recursos, las capacidades y las habilidades propios.
- Detectar el proceso de pensamiento interno del resto y capacitarlos para nuevos cambios.
- Usar técnicas de modelado para aprender habilidades mucho más rápido, con menos esfuerzo y dedicación.
- Enseñar a flexibilizar la conducta proporcionando nuevas opciones de comportamiento y cambios de hábitos.
- Cambiar las respuestas emocionales ante ciertas situaciones.
Qué beneficios tiene la Programación Neurolingüística para el entorno laboral
Puede que en un primer momento pienses que la Programación Neurolingüística no tiene mucha relación con el mundo empresarial; pero, en realidad, la aplicación de las técnicas de PNL al ámbito laboral no solo es una práctica muy común, sino que, además, tiene enormes beneficios para el desarrollo organizacional y profesional.
La PNL ayuda a las organizaciones en lo siguiente:
1. Mejora la gestión emocional
Se trata de una ventaja muy importante, pues ser capaces de aprender a gestionar las emociones propias de forma efectiva desembocará en un grado de comprensión mayor de las emociones del resto del equipo; es decir, un aumento en la empatía. Y es que la PNL está estrechamente relacionada con la inteligencia emocional de las personas.
2. Facilita la relación y participación entre compañeros
Este incremento en la empatía, deriva en una relación más fluida entre los compañeros, ya que se puede llegar a entender las responsabilidades y exigencias de cada uno en su puesto de trabajo. De esta forma, también se favorece un mejor ambiente laboral.
3. Incentiva el trabajo en equipo
Conocer cuáles son las funciones de cada uno y sus respectivos objetivos, fomenta la cooperación y el trabajo en equipo. Una visión compartida y más amplia de los objetivos de los departamentos permite encontrar objetivos comunes o compartidos por encima de los de cada trabajador. Podríamos hablar de una alineación de los objetivos de la empresa con los de los departamentos y los trabajadores.
4. Aumenta el desempeño y la productividad laboral
El trabajo en equipo unido a las técnicas de motivación, así como de autoconocimiento de cada empleado, repercute en un mayor grado de implicación, responsabilidad y autonomía. Todo ello, deriva en un aumento del desempeño y la productividad tanto individual como grupal.
5. Potencia las habilidades comunicativas
Las técnicas de PNL facilitan la comprensión tanto del lenguaje verbal como del no verbal, lo que es muy útil tanto para aprender a comunicar mejor como a interpretar la información que se transmite mediante el lenguaje corporal. Esto ayudará a evitar cualquier malentendido o conflicto que pueda surgir entre el equipo a raíz de los errores de comunicación.
6. Mejora la comunicación intra e interdepartamental
Asimismo, la PNL también se enfoca en trabajar la comunicación orientada a las relaciones interpersonales en la organización tanto a nivel horizontal como vertical. Ser capaces de comunicarse y expresarse adecuadamente facilita la interacción entre los compañeros, la dirección del capital humano, la transmisión de ideas y participación en propuestas de mejora, la relación con los empleados…
7. Disminuye el nivel de estrés de la organización
En la actualidad, el estrés se ha convertido en uno de los principales problemas dentro de las empresas. Viene provocado, en gran medida, por la mala gestión de las emociones que producen las situaciones desconocidas y por un mal ambiente laboral. Sin embargo, gracias a las mejoras que la PNL promueve a nivel de comunicación y relaciones interpersonales, se consigue disminuir el nivel de estrés.
8. Refuerza la relación con los clientes
Las habilidades comunicativas que las técnicas de PNL permiten mejorar garantizan una mayor empatía de cara a los clientes. De esta forma, el Departamento de Ventas podrá entablar una conversación más abierta y de confianza con los clientes, que nos permitirá recabar información más precisa sobre sus necesidades y preferencias. Por tanto, nuestros argumentos de venta y negociación con los clientes serán más eficientes.
9. Ayuda a superar creencias limitadoras
En muchas ocasiones, las barreras o limitaciones con las que nos encontramos en nuestra vida, están en nuestra mente, pero no en la realidad. Suelen ser fruto de malas experiencias anteriores. Ante estas situaciones, la Programación Neurolingüística sirve como herramienta de superación de estas creencias y prejuicios. Ayuda a darse cuenta de las capacidades y recursos de cada uno, así como a anteponer la actitud a los problemas que puedan surgir en el ambiente laboral.
10. Aumenta la capacidad de adaptación
El desarrollo de las habilidades comunicativas, junto con el aumento de la empatía, el autoconocimiento y la motivación, ayuda a afrontar mejor los nuevos proyectos que puedan surgir, y a adaptarse a situaciones desconocidas o cambiantes. La filosofía de la PNL, por tanto, será el catalizador hacia los cambios deseados.
11. Promueve el aprendizaje de nuevas capacidades
Gracias a la utilización de las técnicas de modelado y a la creación de hábitos, la predisposición a aprender cosas nuevas será mucho mayor y, por ello, el desarrollo de habilidades profesionales será más rápido y exigirá un menor esfuerzo.
12. Permite anticiparse y resolver posibles conflictos
Los conflictos laborales pueden afectar tanto a nivel personal como grupal, ya que pueden extenderse más allá de nuestro propio departamento. Por tanto, es muy importante saber identificar a tiempo cuáles pueden ser los detonantes de dicho conflicto para anticiparse a él. Una dirección que sepa entender los diferentes puntos de vista y las motivaciones personales, será capaz de prever las reacciones de los miembros del equipo, antes incluso de que sucedan, así como de solucionar disputas de manera amistosa.
Además, estas técnicas te enseñarán a actuar con asertividad ante aquellas situaciones que puedan derivar en un conflicto.
13. Optimiza la selección de personal
Estas técnicas también se suelen utilizar en gran medida para los procesos de selección y evaluación real de candidatos. Esto se debe a que, durante la entrevista personal, la PNL nos aportará una valiosa información sobre el candidato: cómo se comunica, piensa, actúa, la coherencia entre su mensaje verbal y el lenguaje corporal…; lo que repercutirá directamente en la elección perfecta de las personas para los puestos de trabajo.
Además, favorece el rapport durante la entrevista; es decir, crea un ambiente propicio a una conversación abierta rodeada de empatía y confianza.
Como puedes ver, la PNL se ha convertido en una herramienta indispensable y de gran valor tanto para los RR. HH. como para el desarrollo profesional de cualquier departamento dentro de una empresa; ya que la optimización de la comunicación es una meta a la que debería aspirar cualquier organización que desee mejorar sus resultados y alcanzar sus objetivos de manera eficiente.